INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Publicado 13/10/2025

El megacentro de datos de OpenAI pone a prueba la red eléctrica argentina: los desafíos de energía y refrigeración que vienen

El proyecto Stargate Argentina, impulsado por OpenAI y Sur Energy, demandará una potencia inédita de hasta 500 MW en la Patagonia. Especialistas advierten que el país deberá modernizar su infraestructura eléctrica y energéticapara sostener la expansión de la Inteligencia Artificial.
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El proyecto Stargate Argentina, impulsado por OpenAI y Sur Energy, demandará una potencia inédita de hasta 500 MW en la Patagonia. Especialistas advierten que el país deberá modernizar su infraestructura eléctrica y energéticapara sostener la expansión de la Inteligencia Artificial.

 

El anuncio de OpenAI y Sur Energy sobre la creación del megacentro de datos Stargate Argentina, con una potencia estimada de 500 MW, marca un antes y un después en la relación entre Inteligencia Artificial (IA) y energía. Según Reuters, el proyecto será “uno de los centros de datos más grandes del hemisferio sur”, y su consumo eléctrico equivaldrá al de “una ciudad de 400.000 habitantes”.

 

La elección de la Patagonia no es casual. Su clima frío y su potencial eólico la convierten en una de las regiones más eficientes del mundo para operar centros de cómputo intensivo. Según Buenos Aires Times, el acuerdo con Sur Energy incluiría parques eólicos y solares dedicados al abastecimiento del proyecto, lo que permitiría sostener la operación con una alta proporción de energía limpia.

 

 

Sin embargo, los desafíos ambientales también son significativos. Un informe de Greenpeace Argentina advirtió que el aumento de la demanda energética de los centros de datos podría “elevar el consumo eléctrico nacional en un 10 % hacia 2030”, si no se refuerzan las políticas de eficiencia y generación renovable.

 

El proyecto Stargate Argentina podría convertirse en el mayor catalizador de inversión energética en el país desde Vaca Muerta, pero su éxito dependerá de un equilibrio fino entre desarrollo tecnológico, sostenibilidad y planificación estatal.

 

La era de la IA energética ya comenzó en la Patagonia. Y su éxito no se medirá solo en teraflops o dólares invertidos, sino en la capacidad del país de alimentar con energía limpia el cerebro digital que está empezando a construir.