Se trata del Dispositivo Depresor de Lengua (DDL), un invento único en el país que ya fue aprobado por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) y que está comenzando a utilizarse en instituciones de alta complejidad como el Hospital Italiano y el centro oncológico Mevaterapia.
El DDL fue diseñado para mejorar la precisión de la radioterapia, permitiendo inmovilizar la lengua de los pacientes durante el tratamiento, algo fundamental para evitar irradiar zonas sanas. Hasta ahora, ese procedimiento se realizaba con métodos rudimentarios como bajalenguas de madera o corchos dentales.
“Durante la radioterapia, cualquier milímetro de movimiento puede afectar la efectividad del tratamiento o dañar tejidos sanos. Este dispositivo nos da una solución cómoda, eficiente y hecha a medida para cada paciente”, explicó Gadan en diálogo con Río Negro.
El DDL fue desarrollado junto con el Dr. Lucas Ritacco, coordinador de la Sección Cirugía Asistida por Computadora del Hospital Italiano, y fabricado con tecnología de impresión 3D y materiales biocompatibles. Cada pieza se adapta a la anatomía del paciente y facilita tanto la respiración como la estabilidad durante las sesiones de radiación.
Además de su innovación técnica, el dispositivo tiene un impacto inmediato en la calidad de vida de los pacientes: reduce molestias, disminuye los efectos adversos del tratamiento y mejora la precisión terapéutica en tumores ubicados en zonas complejas.
Cecilia Gadan nació en Neuquén, estudió medicina en Buenos Aires y hoy se desempeña como médica especialista en radioterapia en el Hospital Italiano y Mevaterapia. Completó capacitaciones internacionales en centros de referencia en Bélgica y Estados Unidos, donde se especializó en el uso de nuevas tecnologías aplicadas al tratamiento oncológico.