INTELIGENCIA ARTIFICIAL

Publicado 12/12/2025

EE. UU. avanza hacia un marco nacional único para regular la Inteligencia Artificial

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva destinada a establecer un marco regulatorio federal para la Inteligencia Artificial (IA), con el objetivo de limitar la proliferación de leyes estatalesque, según la Casa Blanca, generan fragmentación normativa y afectan la competitividad tecnológica del país.
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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva destinada a establecer un marco regulatorio federal para la Inteligencia Artificial (IA), con el objetivo de limitar la proliferación de leyes estatalesque, según la Casa Blanca, generan fragmentación normativa y afectan la competitividad tecnológica del país.

La orden, titulada “Eliminating State Law Obstruction of National Artificial Intelligence Policy”, busca impedir que los estados apliquen regulaciones consideradas contradictorias o más estrictas que la política nacional de IA.

 

 

El texto oficial sostiene que Estados Unidos debe contar con una política nacional unificada en IA, diseñada para minimizar cargas regulatorias para las empresas y asegurar condiciones homogéneas de cumplimiento en todo el país.

Desde el Gobierno argumentan que la coexistencia de múltiples marcos estatales genera incertidumbre jurídica y frena la innovación, especialmente en sectores de rápido crecimiento tecnológico.

La orden instruye al Departamento de Justicia a crear un “AI Litigation Task Force”, encargado de impugnar leyes estatales que se consideren incompatibles con el estándar federal.

En paralelo, el Departamento de Comercio deberá publicar en un plazo de 90 días un informe que identifique qué regulaciones estatales representan un obstáculo para el desarrollo de la IA.

 

 

El documento también advierte que los estados que mantengan normativas consideradas conflictivas podrían perder acceso a fondos federales, incluidos recursos del programa BEAD, destinado a la expansión de infraestructura de banda ancha.

Como excepción explícita, la orden aclara que no interfiere con legislaciones estatales vinculadas a la protección infantil.

Desde la Casa Blanca sostienen que la competencia global en IA —particularmente con China— exige una estrategia nacional coherente, capaz de dar previsibilidad a las empresas y acelerar el despliegue de nuevas tecnologías.

Según el Gobierno, un marco único evitaría que las compañías deban cumplir hasta 50 regulaciones diferentes, reduciendo costos y facilitando la innovación en áreas clave como defensa, energía, salud y educación.

Grandes empresas tecnológicas y referentes del sector de IA recibieron favorablemente la iniciativa, destacando que un estándar federal aporta claridad regulatoria y fortalece la capacidad de Estados Unidos para atraer inversiones a gran escala.

De acuerdo con fuentes del sector citadas por Reuters, la medida es vista como un paso necesario para reforzar la posición del país en la carrera global por la IA.

 

 

Sin embargo, la orden generó críticas inmediatas en estados gobernados tanto por demócratas como por republicanos. California, Nueva York y Florida cuestionaron la constitucionalidad del enfoque, señalando que la preeminencia federal sobre leyes estatales requeriría una intervención explícita del Congreso, y no solo una orden ejecutiva.

Expertos legales anticipan un escenario de conflictos judiciales en los próximos meses, ya que varios estados buscarán defender su potestad para legislar en ámbitos como privacidad, protección al consumidor y mitigación de riesgos algorítmicos.

La decisión de Estados Unidos se inscribe en un debate internacional cada vez más intenso sobre cómo regular la IA. Mientras la Unión Europea avanza con su AI Act, basado en un enfoque de análisis de riesgos, y China refuerza normas centradas en la seguridad nacional, Washington apuesta por un esquema de regulación unificada y menos restrictiva para sostener su liderazgo tecnológico.

La medida consolida una tendencia clara: los países que ofrecen marcos regulatorios centralizados y previsibles son los que buscan captar las mayores inversiones en infraestructura de IA, datos y semiconductores, en un contexto de competencia estratégica global cada vez más intensa.