Para aquellos que desean deleitarse con un buen asado sin llegar a los valores de alta cocina, Buenos Aires ofrece un abanico de opciones que conquistan por su excelente relación precio-calidad.
En los barrios porteños, lejos del circuito más turístico, se esconden verdaderas gemas. Lugares como La Chancha y los Veinte en Villa Pueyrredón o Lo del Russo en Villa Crespo son citados por locales y visitantes como alternativas donde la carne al asador es protagonista a precios sumamente accesibles.
El Patio de Mingo en Almagro, un clásico que nunca defrauda con su parrillada completa y ambiente familiar.
Carnes Rojas en Devoto, una opción de “parrilla libre” con buen nivel y un agradable patio al aire libre.
Parrilla Gran Paraíso en La Boca, a pesar de su ubicación turística, sorprende con precios solidarios y calidad en sus carnes, envuelto en la atmósfera de un antiguo conventillo con jardín interior.
Existen establecimientos que logran un equilibrio admirable entre calidad y precio.
La Cabrera, en Palermo, ofrece una propuesta moderna y vibrante, con porciones generosas y creatividad en sus guarniciones. A menudo tiene promociones que la hacen muy competitiva en su segmento.
Parrilla Peña, en el centro, sin lujos pero con asado de gran nivel y famosas empanadas fritas. Un lugar de tradición y porciones abundantes.
Definir la “mejor” parrilla es subjetivo, depende de las prioridades de cada comensal.
Don Julio, si el presupuesto no es un problema y se busca una experiencia gastronómica de clase mundial.
La Cabrera o El Pobre Luis, para quienes buscan calidad con un toque moderno sin llegar a los precios más altos. El Pobre Luis se destaca por su impronta uruguaya y achuras excepcionales.
Las parrillas de barrio, como La Chancha y los Veinte, Lo del Russo o Parrilla Gran Paraíso, ideales para autenticidad, porciones generosas y precios accesibles.
En definitiva, Buenos Aires ofrece una parrilla para cada gusto y cada bolsillo.
La clave está en explorar, dejarse llevar por las recomendaciones locales y disfrutar del asado, una de las expresiones más arraigadas de la cultura argentina.