El presidente Donald Trump anunció planes para establecer una Reserva Estratégica de Criptomonedas en EE.UU., un movimiento que ya ha desencadenado un importante auge en el mercado de criptomonedas. Este anuncio señala un cambio significativo en la participación del gobierno de EE.UU. con la industria de activos digitales, prometiendo redefinir el enfoque del país hacia las criptomonedas y su integración en el panorama financiero más amplio.
La reserva abarcará una amplia gama de activos digitales, incluyendo a los principales actores como Bitcoin y Ethereum, así como Solana (SOL), Ripple’s XRP y Cardano’s ADA. Esta diversificación estratégica demuestra un reconocimiento más amplio del potencial del ecosistema cripto más allá de Bitcoin.
Trump se refirió a la iniciativa en Truth Social, indicando su objetivo de “elevar esta industria crítica después de años de ataques corruptos por parte de la Administración Biden”. Además, enfatizó su compromiso de hacer de EE.UU. la “Capital Cripto del Mundo”.
El anuncio se basa en la orden ejecutiva de Trump de enero de 2025 sobre activos digitales, que instruyó al Grupo de Trabajo Presidencial a evaluar la posible creación de un stockpile nacional de activos digitales. Esta iniciativa tiene como objetivo consolidar la posición de EE.UU. en el panorama cripto global, reforzando el papel de diversas criptomonedas en la infraestructura financiera, los pagos y la finanza descentralizada.
Demostrando aún más su compromiso con la industria de las criptomonedas, la Casa Blanca está programada para organizar su primera Cumbre de Criptomonedas el 7 de marzo de 2025. El evento reunirá a figuras destacadas del sector cripto y miembros del Grupo de Trabajo Presidencial sobre Activos Digitales. Se espera que el presidente Trump pronuncie un discurso, posiblemente delineando su visión para que EE.UU. sea líder mundial en innovación y regulación de criptomonedas. Esta cumbre representa un paso crucial hacia la integración de los activos digitales en el panorama financiero más amplio y podría influir en futuras decisiones políticas relacionadas con la recién anunciada Reserva Estratégica de Criptomonedas de EE.UU.