Desde gigantes tecnológicos como Apple y Meta hasta fabricantes de lentes tradicionales como EssilorLuxottica, todos están compitiendo por un lugar en el rostro —y la vida— de millones de personas.
Consideradas las gafas más avanzadas del año, las Apple Vision Pro ofrecen una experiencia de realidad aumentada y mixta que borra los límites entre lo físico y lo digital. Con pantallas micro-OLED que superan los 23 millones de píxeles y sensores que detectan el movimiento ocular y de manos, este dispositivo está diseñado tanto para el trabajo remoto como para el entretenimiento inmersivo.
Las Ray-Ban Meta Smart Glasses dan un paso más allá al integrar una cámara de 12 MP, audio envolvente y acceso al asistente Meta AI. Los usuarios pueden grabar videos, hacer llamadas o transmitir en vivo a Instagramsin sacar el teléfono del bolsillo.
Las Xiaomi Smart Glasses no solo proyectan notificaciones frente a los ojos, sino que también traducen en tiempo real. Un paso crucial para viajeros y profesionales globales que necesitan entenderse sin barreras lingüísticas.
En el terreno de la salud, EssilorLuxottica avanza con sus lentes de enfoque dinámico, capaces de adaptarse a la luzy corregir la vista en tiempo real según el comportamiento visual del usuario. Una solución prometedora para personas con presbicia o fatiga ocular crónica.
Mientras tanto, gafas como las Sony PlayStation VR2 y la profesional Varjo XR-4 están redefiniendo lo que se puede hacer en un entorno totalmente virtual: desde jugar hasta entrenar médicos en cirugía simulada.
Con estas innovaciones, el futuro parece estar —literalmente— frente a nuestros ojos. Ya no se trata solo de ver mejor, sino de ver más y hacer más, gracias a dispositivos que amplían nuestra percepción, nuestra productividad y nuestras capacidades.